En días recientes, Totalplay, la empresa de telecomunicaciones de Ricardo Salinas Pliego, se volvió tendencia en redes sociales por una polémica decisión sobre su servicio de internet. El tema generó tanta inconformidad que la empresa tuvo que dar marcha atrás. Pero, ¿qué fue exactamente lo que pasó?
¿Qué es el ‘Internet Simétrico’?
Primero hay que entender qué significa ‘Internet Simétrico’. Se trata de un servicio donde la velocidad para subir archivos (como videos, fotos o hacer videollamadas) es igual a la velocidad para descargarlos (como ver películas o bajar documentos). Es decir, si tienes 200 megas de velocidad de bajada, también tendrás 200 megas de subida.
Esto suena bien, sobre todo para quienes trabajan desde casa, hacen transmisiones en vivo o suben contenido constantemente. De hecho, muchos usuarios lo habían solicitado desde hace tiempo.
¿Cuál fue el problema?
Aunque Totalplay anunció con bombo y platillo que ofrecería el Internet Simétrico como una mejora automática en sus paquetes residenciales, hubo un detalle que no cayó nada bien entre los clientes: el límite de consumo mensual de datos.
El nuevo servicio venía acompañado de un tope de uso, como ocurre con algunos planes de celular. Si un usuario excedía ese límite, tendría que pagar 110 pesos extra por cada 100 GB adicionales. Esto generó molestia, ya que muchos usuarios esperaban una mejora sin restricciones, no una ‘mejora’ con condiciones.
En redes sociales, comenzaron a llover críticas. Algunos acusaron a Totalplay de cobrar por algo que antes era ilimitado, mientras que otros se preocuparon por las posibles consecuencias económicas al exceder el límite sin saberlo.
¿Qué respondió Totalplay?
Ante la polémica, Totalplay anunció que los usuarios que no quisieran el servicio de Internet Simétrico podían regresar a su paquete original, sin límites de consumo. También aclararon que la intención del cambio era evitar abusos, como el uso del servicio para revender internet en otras casas o negocios sin autorización.
Por su parte, Ricardo Salinas Pliego defendió la decisión argumentando que se trataba de una medida para mejorar la calidad del servicio y frenar a quienes usan el internet de forma excesiva o ilegal.
¿Y ahora qué?
La empresa sigue ofreciendo el Internet Simétrico, pero ya no lo está aplicando de forma obligatoria a todos los clientes. Si alguien no lo desea, puede pedir que lo quiten. Mientras tanto, la discusión sigue abierta: ¿debería una mejora en el servicio venir con condiciones extra?