Diversos estudios han encontrado que la vitamina D podría desempeñar un papel importante en la reducción del riesgo de desarrollar cáncer de próstata y otros tipos de cáncer. Esta vitamina, fundamental para el buen funcionamiento celular, se ha asociado con un menor riesgo de padecer cáncer cuando sus niveles en el organismo son adecuados.
Estudios recientes sugieren que tener niveles altos de vitamina D podría disminuir hasta en un 20% el riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer, como el de hígado y próstata, especialmente en hombres. Además, se ha observado que pacientes con cáncer de próstata agresivo suelen tener niveles más bajos de esta vitamina, lo que refuerza la idea de su efecto protector.
Aunque aún no se comprende del todo el mecanismo, se cree que sus propiedades antiinflamatorias y su influencia sobre las células cancerosas pueden estar detrás de esta relación. Mantener niveles saludables de vitamina D, ya sea mediante exposición solar o suplementación controlada, podría ser un factor relevante en la prevención oncológica.