El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, manifestó su intención de que las compañías automotrices dejen de fabricar autos fuera de su país, específicamente en México y Canadá. Durante una declaración desde la Oficina Oval, Donald Trump indicó que no quiere vehículos de esos países y que ha implementado “grandes planes” para lograr que las empresas automotrices operen dentro de Estados Unidos.
Además, anunció que los aranceles recíprocos comenzarán a aplicarse el 2 de abril. Donald Trump también comentó que muchas compañías automotrices que planeaban fabricar en México o Canadá ya han comenzado a producir en Estados Unidos. A pesar de los nuevos aranceles, el presidente otorgó una exención temporal de un mes a los fabricantes de automóviles que operan bajo el T-MEC para evitar desventajas económicas.
La medida se dio tras reuniones entre funcionarios de la Casa Blanca y los ejecutivos de las principales automotrices como Ford, General Motors y Stellantis. Estados Unidos sigue siendo el principal socio comercial de México y su mayor comprador de vehículos, sobre todo SUVs y camionetas, debido a la gran demanda y la capacidad productiva limitada de las empresas para abastecerla.