El reciente fallecimiento de la cantante Dulce conmocionó al medio artístico, especialmente tras conocerse que un día antes de su partida aún mantenía la esperanza de recuperarse.
Según un amigo cercano, Iván Cochegrus, la artista mostró miedo por su estado de salud, aunque nada parecía indicar que ocurriría el desenlace final. Su hija Romina estuvo acompañándola de manera incondicional, desmintiendo así rumores sobre un distanciamiento familiar.
A lo largo de sus últimas semanas, Dulce recibió quimioterapia en su propio cuarto y un costoso medicamento que, de acuerdo con los médicos, estaba ofreciendo resultados positivos en la reducción del tumor cercano a la pleura.
De acuerdo con el testimonio de quienes la visitaron en la víspera de la Navidad, la cantante se levantó de la cama, conversó animadamente y hasta disfrutó de un platillo tradicional, lo que hacía pensar que su condición era estable. Sin embargo, el amigo relató que la artista confesó un profundo temor por el futuro, a pesar de que el equipo médico mantenía expectativas favorables.
Dulce había sido diagnosticada luego de presentar una afección pulmonar en un evento en Zacatecas, y se descubrió que un pequeño fragmento del tumor no podía retirarse por completo sin dañar el revestimiento de la pleura.
El entorno más cercano de Dulce resaltó el profesionalismo y la fortaleza que mostró hasta el final, recordando cómo incluso mantuvo presentaciones pese a su delicado estado. Su familia y colaboradores se encontraban optimistas al ver su evolución, motivo por el cual resultó más impactante la noticia de su muerte.
Ahora, en medio de la tristeza y la incertidumbre, sus seres queridos buscan respuestas sobre lo que ocurrió en sus últimas horas, mientras se honra la memoria de la artista y se reconoce la lucha que enfrentó con determinación.