Investigadores de Estados Unidos y Chile han realizado un asombroso hallazgo en las profundidades del océano: una nueva especie de anfípodo depredador jamás vista, descubierta a una increíble profundidad de 7,902 metros en la Fosa de Atacama, una de las zonas más misteriosas del mar.
El nuevo anfípodo, denominado Dulcibella camanchaca, ha sido apodado “Oscuridad” debido a su hábitat en las profundidades marinas. A diferencia de otros anfípodos, que suelen ser carroñeros, D. camanchaca se distingue por ser un cazador activo, convirtiéndolo en el primer anfípodo depredador documentado en la zona hadal, un área extremadamente profunda del océano.
Sus apéndices raptoriales son adaptaciones únicas que le permiten cazar en las oscuras profundidades. Este descubrimiento es uno de los primeros en documentar un depredador tan especializado en estas remotas zonas marinas.