Meta Platforms Inc. se enfrenta a un histórico juicio antimonopolio que podría llevar a la empresa a separarse de Instagram y WhatsApp, dos adquisiciones clave realizadas hace más de una década. La Comisión Federal de Comercio (FTC) argumenta que Meta compró estas plataformas para eliminar la competencia y mantener su dominio en el mercado de redes sociales, aplicando una estrategia que su CEO, Mark Zuckerberg, describió como “es mejor comprar que competir”. El juicio, que incluye el testimonio de Zuckerberg, representa un intento significativo del gobierno estadounidense por frenar el poder de las grandes tecnológicas.
La FTC sostiene que Meta ha bloqueado el ingreso de nuevos competidores al mercado mediante políticas restrictivas y adquisiciones estratégicas. También acusa a la empresa de reducir la innovación y perjudicar al consumidor. Sin embargo, Meta defiende sus acciones, argumentando que sus adquisiciones fueron aprobadas en su momento y que actualmente compiten con una amplia gama de plataformas como TikTok, YouTube e iMessage. Además, la empresa advierte que la demanda afecta la seguridad jurídica de las fusiones empresariales y podría debilitar la innovación tecnológica estadounidense frente a potencias como China.
El caso, que será decidido por el juez federal James Boasberg, enfrenta el desafío de definir con precisión el mercado en cuestión y demostrar que Meta mantiene un poder monopolístico actualmente. La FTC tiene una carga probatoria compleja, ya que muchos expertos consideran que el mercado de redes sociales es cada vez más competitivo. Aunque el resultado aún es incierto, el juicio podría tener consecuencias significativas para el futuro de Meta y marcar una clave precedente en la regulación de gigantes tecnológicos en Estados Unidos.
