El gobierno federal cuenta con una estrategia que contempla tanto posibles deportaciones masivas de connacionales desde Estados Unidos como el regreso voluntario de quienes así lo deseen.
En ambos supuestos, las autoridades ofrecerán opciones de empleo y acceso a los programas de bienestar de forma ágil para facilitar la reinserción de las personas en sus comunidades de origen, garantizando su seguridad y el acompañamiento necesario.
Asimismo, se han definido acciones para reforzar la Red consular en el país vecino del norte, con el objetivo de brindar asesoría legal y orientación a quienes se encuentren bajo amenaza de deportación o enfrenten dificultades migratorias.
La cancillería ha recibido indicaciones para brindar una atención cercana a los mexicanos que viven en Estados Unidos. Entre las medidas contempladas, se destacan los servicios de apoyo jurídico y el reforzamiento de líneas de contacto consulares para que, ante cualquier riesgo, los connacionales puedan acceder fácilmente a la protección y asesoría del gobierno de México.
Estas acciones también pretenden que, en caso de deportación o retorno voluntario, las personas puedan reincorporarse de inmediato a su entorno familiar y laboral en territorio nacional.
Como parte de los preparativos para el cierre de año, se ha presentado un programa especial que incluye teléfonos y redes sociales destinadas a recibir denuncias o peticiones de apoyo. Dichas herramientas buscan atender de manera oportuna las necesidades de los paisanos, tanto quienes radican en Estados Unidos como los que deciden volver al país.
Con este enfoque integral, las autoridades federales señalan que están listas para afrontar las contingencias migratorias y atender de forma adecuada a quienes retornen.