El Gobierno de México implementará en enero un mecanismo de aviso instantáneo para que los connacionales indocumentados en Estados Unidos puedan notificar a los consulados y a sus familiares en caso de detención o proceso de deportación.
El “botón de alerta” enviará una señal al consulado mexicano más cercano, a la Cancillería en México y a contactos registrados previamente, con el objetivo de actuar con rapidez ante las deportaciones que ha prometido el presidente electo estadounidense, Donald Trump.
Como parte de la estrategia de protección, el país cuenta con la red consular más extensa de un solo país en Estados Unidos, compuesta por 53 consulados, además de asesorías legales externas y voluntarias.
Las autoridades mexicanas subrayan la importancia de asistir a los 4.8 millones de mexicanos indocumentados en Estados Unidos, ya que representan casi la mitad de la población total en esta situación y aportan remesas equivalentes al 4% del PIB nacional.
El plan abarca visitas constantes a centros de detención y coordinación con los agentes de inmigración estadounidenses, reforzando la presencia de consulados y la atención legal de los migrantes.
Asimismo, se destaca que la población de origen mexicano en territorio estadounidense, entre indocumentados e inmigrantes de primera generación, asciende a 11.5 millones, cuya contribución económica equivale al 8% del PIB de Estados Unidos.