Silvia Pinal, la legendaria actriz mexicana, dejó una huella indeleble en el cine de oro de México, y ahora su legado ha sorprendido aún más al público tras revelarse que incluyó en su testamento a su mascota, la chihuahua llamada Cosita.
La perrita, que acompañó a Pinal durante más de 15 años, recibirá parte de la fortuna de la actriz para garantizar su bienestar en sus últimos años.
Esta decisión ha causado revuelo en medio de rumores sobre desacuerdos familiares sobre la distribución del patrimonio.
Tras el fallecimiento de la actriz, Efigenia Ramos, quien fue su asistente personal, es ahora la encargada de cuidar a Cosita, una perrita que había sido inseparable de Silvia Pinal, compartiendo momentos entrañables con su dueña hasta el final.