El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha tomado medidas para restringir el poder de Elon Musk en su rol dentro del gobierno, limitando su influencia sobre los despidos de empleados federales.
Donald Trump le recordó a Elon Musk, asesor del gobierno y encargado del ‘Departamento de Eficiencia Gubernamental’ (DOGE), que su papel se limita a hacer recomendaciones sobre personal y no a tomar decisiones unilaterales.
Esta acción surge después de los despidos masivos impulsados por Elon Musk, quien había sido acusado de aplicar métodos cuestionables, como amenazas a empleados.
Tras una reunión con su gabinete, Donald Trump expresó que su objetivo es reducir el personal innecesario sin afectar a los trabajadores clave, sugiriendo que la selección de personal debe realizarse con precisión y no de forma drástica.
Elon Musk aceptó los errores de DOGE, reconociendo que algunos despidos fueron inapropiados.