Un joven de 24 años falleció en Saltillo, Coahuila, a causa de una severa infección dental que se complicó y afectó su salud de forma irreversible. Aunque se encontraba bajo tratamiento con antibióticos, su estado de salud se complicó rápidamente al presentar una inflamación en el cuello, lo que inicialmente hizo pensar a su familia que podría tratarse de paperas.
En el Hospital General de Saltillo, los médicos confirmaron que la infección se había extendido desde la muela hasta la garganta, afectando áreas delicadas del cuello y agravando su estado de salud. Debido a la gravedad del cuadro, fue necesario intubarlo e intervenirlo quirúrgicamente. Sin embargo, la infección ya había avanzado, afectando tejidos en varias partes del cuerpo. Pese a los esfuerzos médicos, el joven falleció el 2 de julio tras permanecer varios días hospitalizado.
Su familia, afectada tanto por la pérdida como por la situación económica, solicitó apoyo para cubrir los gastos funerarios. El caso ha generado conciencia sobre los riesgos de las infecciones dentales no tratadas, las cuales pueden derivar en complicaciones como sepsis, mediastinitis o incluso abscesos cerebrales, con consecuencias potencialmente mortales si no se atienden a tiempo.




