China incorporó a su Armada el Type 076, conocido como Sichuan, un moderno buque de asalto anfibio que supera las 40,000 toneladas de desplazamiento a plena carga y está equipado con un sistema de catapulta electromagnética.
Esta tecnología le permite transportar tanto helicópteros como aviones de ala fija, incluidos drones de combate y reconocimiento, lo que refuerza la capacidad de la Marina china para proyectar poder lejos de sus costas.
El proyecto complementa el rápido crecimiento de la flota, que ya es considerada la más numerosa del mundo, e incluye portaaviones de última generación como el Fujian, aún en fase de pruebas.
El Type 076 se sitúa en la misma categoría que los buques más grandes de su clase a escala internacional y puede llevar un contingente considerable de infantes de marina y lanchas de desembarco, además de aeronaves no tripuladas y helicópteros.
Estas prestaciones lo diferencian de otros portahelicópteros más ligeros y remarcan la intención de las autoridades chinas de desarrollar operaciones de desembarco anfibio a gran escala y, de ser necesario, operar en misiones expedicionarias o humanitarias.
Analistas señalan que la incorporación de naves de esta magnitud demuestra el compromiso de China por igualar o superar el poderío de Estados Unidos en el mar, sobre todo considerando la capacidad de la Marina estadounidense, que cuenta con sistemas de catapulta electromagnética solo en su portaaviones más reciente.
Para la Armada del Ejército Popular de Liberación, este buque representa un paso más en la carrera de modernización y consolidación de su presencia en zonas marítimas estratégicas.